La primavera astronĂłmica, que comenzará el 20 de marzo a las 10.37 horas en la PenĂnsula será probablemente más cálida y seca de lo normal, despuĂ©s de un invierno que, pese a la histĂłrica ‘Filomena’, ha tenido un carácter cálido, hĂşmedo y, que sobre todo ha estado marcado por los contrastes, segĂşn ha informado la Agencia Estatal de MeteorologĂa (AEMET).
La portavoz de la AEMET Beatriz Hervella ha precisado en la rueda de prensa estacional que será «probablemente» más cálida de lo normal en el conjunto de España pero hay una mayor certeza de que esto será asĂ en el este de la PenĂnsula y en Balares. En cuanto a las precipitaciones, ha añadido que previsiblemente será más seca de lo habitual en el noroeste peninsular aunque para el resto del paĂs no hay una señal «clara».
Además, estima que entre abril y junio se produzca el escenario más probable es que en la PenĂnsula y Baleares la temperatura media del trimestre quede «al menos 0,5ÂşC» por encima de lo normal, aunque en algunas zonas esta anomalĂa será superior.
Por su parte, el portavoz Rubén del Campo, ha detallado el carácter climatológico del invierno que ha sido «cálido y húmedo» de modo que se ha convertido en el sexto más cálido y más lluvioso del siglo XXI. En comparación con la serie histórica, de 60 años, este ha sido el decimotercero más cálido y el vigésimocuarto más húmedo.
En concreto, ha dicho que la temperatura media del invierno fue de 7,1ÂşC en el conjunto de la PenĂnsula, un valor que se sitĂşa 0,7ÂşC por encima de la media de la estaciĂłn de acuerdo con el periodo de referencia 1991-2010.
Por zonas, el invierno fue cálido o muy cálido en el cuadrante noreste de la PenĂnsula y en las comunidades autĂłnomas de Valencia y de Murcia, mientras que tuvo un carácter muy variable en el resto del territorio peninsular español, aunque predominando el carácter normal. En Baleares el invierno fue cálido, mientras en Canarias resultĂł normal en su conjunto.
Las temperaturas máximas se quedaron de media 0,3ÂşC por encima del valor normal del trimestre, mientras que las mĂnimas fueron 1,1ÂşC superiores a las normales. Con todo, segĂşn el portavoz, la oscilaciĂłn tĂ©rmica diaria fue 0,8ÂşC inferior a la normal.
Del Campo ha indicado que el invierno comenzĂł con un diciembre normal, con un diciembre normal, pero enero fue frĂo, con una temperatura 0,6ÂşC inferior a la normal, de modo que fue el cuarto enero más frĂo del siglo XXI. Sin embargo, febrero fue muy cálido, con una temperatura de 0,7ÂşC superior a la media del mes, lo que convierten a este periodo en el más cálido desde que comenzĂł la serie en 1961 y el segundo más cálido del siglo XXI.
Otra de las caracterĂsticas propias del invierno 2020-2021 fueron «los extremos» registrados a lo largo de la estaciĂłn, pues en enero se produjeron dos olas de frĂo, de las que la segunda, posterior a la histĂłrica nevada provocada por la borrasca ‘Filomena’ se prolongĂł durante ocho dĂas y dejĂł valores de menos de -25ÂşC y varios rĂ©cord de frĂo.
ENERO DE CONTRASTES
«Fue la segunda ola de frĂo más importante del siglo XXI por duraciĂłn e intensidad, tras la registrada en diciembre de 2001 y convirtiĂł, a la primera quincena de enero, en la segunda más frĂa de la serie», confirma el portavoz que destaca que a continuaciĂłn se registrĂł una segunda quincena, «la más cálida de la serie desde 1966».
De hecho, ha añadido que en esos dĂas se batieron «numerosos» rĂ©cord de calor, con 29,8ÂşC en Alicante, que es la temperatura más alta registrada hasta la fecha en cualquier mes de enero en la red de estaciones de AEMET.
Durante el invierno que está a punto de terminar ha destacado el «prolongado» episodio frĂo que comenzĂł el 24 de diciembre debido a un intenso flujo del norte, y que se prolongĂł e intensificĂł durante la primera quincena de enero con la llegada de la borrasca Filomena, la cual dio lugar a intensas nevadas en amplias zonas del interior peninsular.
Cuando se retirĂł la borrasca se estableciĂł sobre la penĂnsula un anticiclĂłn, lo que unido a la gran capa de nieve existente en amplias regiones dio lugar a temperaturas excepcionalmente bajas, que alcanzaron valores por debajo de -20 ÂşC en algunas zonas.
«Con los datos actualmente disponibles, se puede considerar que en enero hubo dos olas de frĂo. La primera, de corta duraciĂłn, se extendiĂł entre los dĂas 5 y 8. La segunda, de intensidad excepcional, se observĂł entre los dĂas 11 y 18, despuĂ©s de las nevadas de la borrasca Filomena», ha precisado.
Las temperaturas más bajas de la estaciĂłn se registraron en la madrugada del 12 de enero en el interior peninsular y destaca los -25,2 ÂşC registrados en Molina de AragĂłn, los -21,0 ÂşC de Teruel, los -14,1 ÂşC de Albacete/base aĂ©rea y los -13,7 ÂşC observados en TorrejĂłn de Ardoz. En TorrejĂłn se alcanzĂł el 8 de enero la temperatura diaria más baja desde que hay registros, ya que no se superaron en todo el dĂa los 0 grados centĂgrados.
En cuanto a precipitaciones, el portavoz ha explicado que el invierno fue en conjunto húmedo: un 11 por ciento más húmedo de lo normal, ya que se alcanzó una precipitación media de 218 litros por metro cuadrado. Es asà el vigesimocuarto invierno más húmedo desde el comienzo de la serie en 1961 y del sexto más húmedo del siglo XXI.
Por zonas, en la PenĂnsula fue hĂşmedo, mientras que en Baleares tuvo un carácter seco y en Canarias resultĂł normal. Por zonas, la estaciĂłn fue hĂşmeda o muy hĂşmeda en el cuadrante noroeste y en el centro peninsular, y llegĂł a ser «extremadamente hĂşmedo en el Cantábrico» es decir que allĂ fue el más hĂşmedo desde que hay registros. Por el contrario, fue seco o muy seco en la costa de Cataluña y en las comunidades autĂłnomas de Valencia y de Murcia.
Por meses, diciembre fue normal ya que llovió el 90 por ciento de lo habitual, mientras que enero y febrero tuvieron un carácter húmedo, con precipitaciones equivalentes al 111 por ciento y al 135 por ciento del valor normal, respectivamente.
Durante el trimestre diciembre de 2020 a febrero de 2021 se contabilizan varios episodios de precipitaciones intensas. En concreto, en diciembre desde el dĂa 4 al 10 los sucesivos frentes asociados a las borrascas Dora y Ernest dejaron lluvias abundantes en Galicia y elCantábrico. El dĂa 15 tambiĂ©n hubo precipitaciones intensas en el oeste de Galicia, mientras que un nuevo episodio, los dĂas 27-29, predominĂł un marcado flujo de componente norte propiciĂł abundantes precipitaciones en el Cantábrico y en el pirineo occidental, con intensas nevadas en zonas de montaña de estas regiones.
De enero, el portavoz ha subrayado el episodio de los dĂas 6 al 10, cuando ‘Filomena’ dejĂł precipitaciones intensas en el sur, centro y este de la penĂnsula y en los archipiĂ©lagos balear y canario, siendo lo más destacado la gran nevada «histĂłrica» ocurrida en el interior peninsular los dĂas 8 y 9, cuando se acumularon hasta 50 centĂmetros de nieve en Madrid y otras zonas del centro y del este peninsular. Tras ‘Filomena’ del 19 al 26 de enero, las borrascas Gaetan, Hortense e Ignacio dejĂł precipitaciones abundantes en el oeste de la penĂnsula y en sistemas montañosos del interior.