El ser humano es un ser social por naturaleza, as铆 lo afirmaba Arist贸teles hace m谩s de dos mil trescientos a帽os para constatar, entre otras cosas, que los humanos nos necesitamos unos a otros para sobrevivir. Desde el primer n煤cleo social, la familia, hasta otros m谩s complejos, los seres humanos buscamos formar sociedades que satisfagan, al menos, nuestras necesidades b谩sicas de protecci贸n tanto f铆sica como social, afectiva o intelectual, necesidades que forman parte de la condici贸n humana y que por s铆 solos no podr铆amos satisfacer.
La salud, la educaci贸n, la seguridad, la libertad, el trabajo, el cuidado y respeto de nuestros mayores, del h谩bitat que nos rodea, la defensa del territorio en que vivimos, son necesidades que nos unen por ser innatas al ser humano y a la sociedad que ha creado, de la que forma parte. Por eso, una sociedad centrada en todo lo que nos une es una sociedad que avanza.
Pero la uni贸n exige, principalmente, empat铆a y responsabilidad. Las personas, como parte de la sociedad, estamos obligadas a esforzamos por mantenernos unidos y mostrar esa responsabilidad emp谩tica que nos lleve a cubrir las necesidades prioritarias y as铆 alcanzar ese bienestar, siempre mejorable, que nos acerca a la felicidad personal y social, y que responde al deseo humano de vivir en un estado de estabilidad, satisfacci贸n y tranquilidad permanente.
Es cierto que muchos ciudadanos, por ego铆smo y dejadez, carecen de esa empat铆a, responsabilidad y sentido de uni贸n social que se requiere para seguir avanzando, lo triste es que sean, en este caso, los dirigentes pol铆ticos de la izquierda de nuestro pa铆s los que hayan demostrado repetidamente la carencia de estos valores. Y es que si hoy vivimos momentos de incertidumbre y desconfianza pol铆tica no es porque los ciudadanos no hayan cumplido su cometido (hemos votado 4 veces en 4 a帽os) sino porque los responsables pol铆ticos que han obtenido una mayor铆a, representados por el presidente en funciones Pedro S谩nchez, han olvidado el fin para el que han sido elegidos, anteponiendo lo que nos diferencia a lo que nos une, o lo que es lo mismo, priorizando sus intereses personales y partidistas de poder a nuestras necesidades b谩sicas.
Creo que llegados al punto de hartazgo social en el que nos encontramos, toca hacer una reflexi贸n abierta y profunda por parte de todos, pol铆ticos y no pol铆ticos, que nos haga avanzar y superar esta situaci贸n de bloqueo y desgobierno. Una reflexi贸n que nos lleve, por parte de los pol铆ticos, a dar importancia a lo prioritario, a las necesidades, al bienestar, a lo que nos une, y a recuperar el di谩logo, la integraci贸n y el acuerdo como f贸rmula de respeto a la decisi贸n ciudadana en las urnas y a los 47 millones de espa帽oles; y, por parte de los ciudadanos, a demostrar nuestra madurez como votantes reconsiderando un voto que debe ser 煤til y exigente, un voto dirigido hacia aquella opci贸n pol铆tica que haya demostrado capacidad de acuerdo y gobierno en otras comunidades.
El Partido Popular ha liderado la uni贸n, la sensatez y el acuerdo en todas aquellas administraciones que ha tenido oportunidad; ha dejado de lado lo que nos diferencia y ha apostado por lo que nos une; ha antepuesto el sentido de estado a sus intereses particulares, y siempre con un solo fin, el de luchar por una Espa帽a fuerte, estable, garante de oportunidades y de futuro.
Ram贸n Rodr铆guez
Miembro de la candidatura al Senado del PP por la provincia de Albacete
