Paradores registró unos ingresos de 5,2 millones de euros por alojamiento, la mejor cifra desde 2006 a pesar de las condiciones climatologías adversas, que refleja la mejora tanto en ingresos totales como en el índice de ocupación, que alcanzó de media el 73,43%, en el ingreso medio por habitación así como en restaurantes y otros servicios. Según los datos difundidos este martes por la cadena hotelera pública, los paradores de Cádiz y de Cuenca han alcanzado los máximos de ingresos en Semana Santa desde su inauguración en 1929 y 1994, respectivamente.
En concreto, los ingresos totales durante el periodo, que incluye este año del viernes 12 al 21 de abril, ascendieron a 9,22 millones de euros, lo que supone un 5,7% más que en la temporada de Semana Santa del pasado año, cuando facturó 8,72 millones de euros.
De esta cifra, 5,15 millones de euros correspondieron a hospedaje, frente a los 4,8 millones de euros alcanzados el pasado año, un 7,25% más. Esta cantidad supone el mayor volumen de ventas por alojamiento desde el año 2006, cuando se alcanzaron los 10,24 millones de euros.
En cuanto a la restauración, los restaurantes de la red de Paradores ingresaron 3,13 millones de euros, lo que representa un 6,15% más respecto a 2018 cuando obtuvieron por este concepto 2,95 millones de euros.
En términos de ocupación, el promedio fue del 73,43% desde el 12 al 21 de abril en toda la red y, en los días principales, del Jueves Santo, Viernes Santo y sábado ha superado la media del 86%.
A pesar de las condiciones meteorológicas adversas, que han afectado este año a buena parte de la península durante el periodo vacacional, algunos paradores han logrado cifras récord de ocupación en Semana Santa: Granada (97%); Ronda, Lerma, Cáceres, Málaga, Gifralfaro y Las Cañadas del Teide (92%); Alcañiz y Olite (91%); Teruel, Lleida, Cazorla, Castillo de Monterrei, Cruz de Tejeda y Santiago de Compostela han rozado el 90%.
El presidente y consejero delegado de Paradores, Óscar López, ha valorado que estas cifras son el «fiel reflejo» de una tendencia al alza de los ingresos de la compañía, que está batiendo récords desde que comenzó el año. «Una muestra nítida de que empresa pública puede ser económicamente muy rentable y realizar, al mismo tiempo una importante labor cultural y social», señala.
