lunes, 22 abril, 2024

Una pena de 14 aƱos para la madre de una menor a la que prostituƭa en Puertollano

La madre y los cuatro acusados a los que se ratifican las penas son condenados a 5 aƱos de prisiĆ³n por delito de prostituciĆ³n y a otros 9 aƱos de prisiĆ³n por delito de abuso sexual con acceso carnal

La Sala Segunda del Tribunal Supremo ha confirmado la condena de 14 aƱos de prisiĆ³n impuesta por la Audiencia de Ciudad Real a una mujer por prostituir en Puertollano a una de sus hijas, que tiene una discapacidad y que en el momento de los hechos contaba 15 aƱos de edad. La misma pena de 14 aƱos de cĆ”rcel es ratificada para cuatro hombres por abusar sexualmente de la menor.

El Tribunal absuelve a otro acusado -que venĆ­a condenado por la Audiencia de Ciudad Real a 7 aƱos de prisiĆ³n- al no estar probado en su caso el abuso sexual, ya que la propia menor le exculpĆ³ en sus declaraciones diciendo que no le conocĆ­a, segĆŗn informa el Supremo.

La madre y los cuatro acusados a los que se ratifican las penas son condenados a 5 aƱos de prisiĆ³n por delito de prostituciĆ³n y a otros 9 aƱos de prisiĆ³n por delito de abuso sexual con acceso carnal. En el caso de la madre, como cooperadora necesaria.

Todos ellos tendrƔn que indemnizar conjuntamente con 50.000 euros a la vƭctima, y se decreta ademƔs la pƩrdida de la patria potestad de la madre respecto a la vƭctima.

El hombre que ahora es absuelto, de 83 aƱos de edad, fue condenado en primera instancia a 5 aƱos por delito de prostituciĆ³n y a otros 2 por abuso sexual sin acceso carnal.

El Supremo destaca en su sentencia que en el caso de los otros cinco acusados hay prueba suficiente para fundar la condena, pero en el caso de esta persona, la vĆ­ctima declarĆ³ que no le conocĆ­a del pueblo, que no lo habĆ­a visto y que no le sonaba su nombre. De modo que el Supremo entiende que no es posible mantener la condena.

Los hechos probados de la sentencia seƱalan que entre noviembre de 2013 y febrero de 2014, M.A.E.G., aprovechando su vĆ­nculo materno-filial con la vĆ­ctima, que entonces contaba 15 aƱos de edad y un grado de discapacidad del 51 por ciento, la obligĆ³ a realizar conductas de carĆ”cter sexual con acceso carnal por vĆ­a vaginal con los otros cuatro acusados varones.

Tales encuentros, aƱade, se producƭan, bien en el domicilio familiar p bien en el domicilio de los acusados; encuentros sexuales a cambio de los cuales recibƭa dinero o tabaco la madre de la menor.

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